Cómo afectan a la empresa el clima y la cultura organizacional
Aunque a veces se pueden subestimar, el clima y la cultura tienen un impacto directo en el desempeño y éxito de cualquier organización. Hoy quiero compartir contigo algunos comportamientos que caracterizan a las empresas que han desarrollado buen o mal clima y cultura organizacional.
CLIMA Y CULTURA ORGANIZACIONALTRABAJO EN EQUIPO
¿Eres de los que se levantan todos los días con alegría y ganas de dar lo mejor de ti en el trabajo? ¿O eres de los que viven esperando a que llegue el viernes y nunca se acabe el domingo?
Por experiencia sé que tu respuesta dependerá en gran medida de cómo se construyen los relacionamientos en tu lugar de trabajo. Dependerá de si es un lugar donde se tratan con amabilidad, hay espacio para aportar ideas y estrategias adecuadas para resolver conflictos. Aunque a veces se pueden subestimar, el clima y la cultura tienen un impacto directo en el desempeño y éxito de cualquier organización.
Hoy quiero compartir contigo algunos comportamientos que caracterizan a las empresas que han desarrollado buen o mal clima y cultura organizacional.
La cultura es cómo somos y nos tratamos aquí; desde esta perspectiva, una buena cultura organizacional genera patrones de comportamiento donde:
Nos cuidamos los unos a los otros.
El objetivo común se marca como una meta por la cual nos esforzamos como equipo.
El valor y el esfuerzo individual influyen tanto en el proceso como en el resultado.
En cambio, una mala cultura organizacional fomenta patrones de comportamiento de:
“Sálvese quien pueda”.
“Mi trabajo es lo importante”.
“Yo aquí no vine a hacer amigos”.
“Yo cumplo y salgo”.
De otra parte, el clima organizacional tiene que ver con "cómo nos tratamos aquí". Un buen clima favorece a las empresas en la medida en que hay:
Un ambiente saludable.
Un trato cercano y respetuoso.
Un manejo emocional sano.
Ahora, un mal clima organizacional hace sentir a la gente:
Sola.
Que su esfuerzo no es tenido en cuenta.
Que daría lo mismo que estuvieses o no en ese lugar.
A veces no es fácil construir un buen clima y una buena cultura en el lugar de trabajo. Sin embargo, tu actitud puede hacer una gran diferencia, para bien o para mal. ¿En tu empresa el ambiente es muy pesado? Pregúntate si tu actitud contribuye de alguna forma. ¿Afortunadamente trabajas en un lugar donde se respira un buen ambiente? Revisa cómo tu actitud ha aportado y qué puedes seguir haciendo para mantenerlo.
¿Cuál es tu actitud para construir el clima y la cultura de la organización en la que trabajas?



